Juan Bosco

Los salesianos son los titulares de nuestro colegio. Brevemente presentamos quién fue el fundador, quién fue Don Bosco. Juan Bosco nace el 16 de agosto de 1815 en I Becchi, caserío de Castelnuovo d’Asti (hoy Castelnuovo Don Bosco).
Su familia es de pobres campesinos. Queda huérfano de padre a los dos años. Su madre Margarita lo saca adelante con suavidad y energía. Le enseña a trabajar la tierra y a ver a Dios en la hermosura del cielo, en la abundancia de las cosechas y en el pedrisco que machacaba las viñas.
A la edad de nueve años un misterioso sueño marca su vida. Su camino queda orientado a la luz de éste: será sacerdote. Ya como sacerdote Don Bosco llega a Turín en 1841 en plena revolución industrial. Don José Cafasso, su director espiritual, le da este consejo: “Camina y mira a tu alrededor”. Es así como el joven sacerdote explora la miseria humana. Esta lo sacude con fuerza.
Los suburbios de la ciudad eran hervideros juveniles, focos de perversión y de peleas, verdaderas zonas de desolación. Adolescentes ociosos y aburridos vagabundeaban por las calles dispuestos al robo y a la pendencia. Las cárceles le impresionan de manera sobrecogedora. Sale de ellas totalmente decidido: “Como sea, debo hacer lo imposible para evitar que encierren en ellas a chicos tan jóvenes”.
Muchos curas de entonces esperaban que los jóvenes emigrantes fueran a sus iglesias y sacristías a recibir la catequesis tradicional. Otros intentaban probar nuevas formas de apostolado, un apostolado volante yendo directamente a fábricas y talleres, comercios, hosterías y plazas. Don Bosco es uno de ellos. A partir de 1841 comienza a acoger en su casa, en el Oratorio, a los primeros chicos de la calle.
Desde ese momento el número de niños y jóvenes acogidos por Don Bosco comenzará a crecer exponencialmente porque muchos jóvenes de estos no tienen donde ir a dormir. Su primera bienhechora es su madre, Margarita, pobre campesina analfabeta que tiene entonces 59 años. Deja su casita en la aldea y acompaña a su hijo. Se encargará de la cocina y de la ropa de los bribonzuelos. Más de uno de aquellos mismos muchachos que tienen a Don Bosco como padre y maestro, quieren llegar a ser como él.
Y así nace la Congregación Salesiana con el nombre de Sociedad de San Francisco de Sales. En otoño de 1853 empiezan a funcionar en Valdocco los primeros talleres. Don Bosco en persona es el primer maestro. Después de extender la Congregación y su Sistema preventivo por todo el mundo (Italia, Francia, España, Argentina…), Don Bosco muere el 31 de enero de 1888.
Una de sus últimas frases está dedicada a quienes más amó: “Decid a mis muchachos que les espero en el Paraíso”. Hoy los Salesianos están presentes en 134 países. Don Bosco movido por el Espíritu Santo dio vida a varias fuerzas apostólicas y a un amplio movimiento de personas que de diferentes maneras trabajan en favor de los jóvenes y de las clases populares.